Un espacio cercano y seguro
Consideramos a cada alumn@, miembro de nuestra comunidad de práctica y enseñanza del yoga, desde su esencia profunda.
¡Estamos agradecidas a la vida por nuestr@s alumn@s! (Shantosha, positividad, contentamiento, gratitud; Yoga Sutras)
Yogatropía Espacio para Ser, cumple 8 años. Ya hemos dado una vuelta completa al septenario!!!
Desde que en 2017 iniciamos este proyecto, hemos visto crecer nuestra pequeña comunidad yóguica, tanto en profundidad como en anchura. Contamos con personas a las que llamamos sin reservas, amigas. Personas a las que queremos y que nos quieren. Grupos que nutren y que son nutridos por las personas que los integran (Shanga: función elevada de una comunidad, como espacio de crecimiento e intercambio).
Yogatropía, siendo un pequeño centro de yoga, consiguió sobrevivir a una pandemia que supuso el fin para muchos proyectos de este tipo. Lo logramos gracias a la solidaridad y el cariño de nuestr@s
alumn@s. Lo que nos protegió entonces fue esa visión de comunidad (Sangha) que desde el principio venimos desarrollando como seña de identidad:
Aquí se crean amistades, se nutren los vínculos, aquí la gente importa, forma parte, teje redes de interacción y apoyo desde el valor de nuestra humanidad compartida. Nos llena de satisfacción poder afirmar sin lugar a dudas que somos un espacio cercano y seguro para todas las personas que vienen a practicar con nosotras.